Ir al contenido principal

Los estándares, y los forros de los cojones.

Buenas noches,

hace unos días, un tal Anónimo tuvo la gentileza de dejar un comentario en mi entrada anterior, en la que colgué una operación de cirugía digital que le hice a mi amiga Sonia.

El comentario, que venía más o menos a aportar exactamente nada al post, era en realidad una excusa para colar un poquito de spam o autobombo. La web de tal modo publicitada aquí era una tal http://www.dimequecrees.com que, devolviendo la cortesía, me tomé la molestia de visitar.

Al segundo intento (el del día anterior fue fallido porque dicho site estaba caído por un problema de su base de datos), pude comprobar que se trataba de un sitio no sé muy bien dedicado a qué, pero en apariencia a noticias y cotilleos del mundo latinoamericano.

Llamome la atención que en el footer de la página principal, aparecen los típicos botones para validar y demostrar que el código interno de la página (las tripas) cumplen escrupulosamente con el estándar que se escogió con tal finalidad.

O sea en esencia, esto:

Maravillado por tan inusual factura técnica en estos tiempos que corren, se me ocurre pinchar en el validador principal (el del XHTML), y, ¿sorprendentemente?, lejos de un informe de validación limpio y sin errores, me encuentro semejante disparate:


¿Han leído bien? ¡238 errores y 128 advertencias! Oh my God! ¡Y eso sólo en la página principal que apenas tiene elementos!

Eso sí que es pasarse los estándares por las relucientes partes del creador, o de los forros que las cubren.

Lanzo dos preguntas más bien retóricas pero inevitables: ¿para qué narices pones un icono de validación de XHTML que demuestre lo bien hecha que está tu web, cuando está hecha con el culo? ¿Y por qué me enfado yo tanto con algo tan tonto?

El que sepa de qué hablo, sea un buen webmaster o desarrollador, o esté acostumbrado a trabajar con estándares, no le aportará nada nuevo seguir leyendo. Al resto les puede resultar interesante o útil la siguiente información:

La web, tal y como la conocemos hoy día, está construída sobre la base de una serie de estándares y recomendaciones establecidas por el World Wide Web Consortium (http://www.w3.org), destinadas a poner orden en la jungla tecnológica en que se había convertido la WWW durante sus primeros años de vida.

Aplicado al mundo de la tecnología, ¿en qué consiste una estandarización? Me gusta la definición que encontré en la Wikipedia en su momento:
La normalización o estandarización es la redacción y aprobación de normas que se establecen para garantizar el acoplamiento de elementos construidos independientemente, así como garantizar el repuesto en caso de ser necesario, garantizar la calidad de los elementos fabricados y la seguridad de funcionamiento.

Hablando en cristiano: cuando a ti se te funde una bombilla, o compras un alargador eléctrico para enchufar tus aparatos, normalmente no tienes que preocuparte de las características técnicas que tienen dichos artilugios (al menos dentro de tu país o paises colindantes); la rosca del casquillo será sólo grande o chica, pero siempre tiene unas dimensiones concretas, una forma espiral con unas medidas determinadas, un voltaje de funcionamiento determinado, etc. y cuando tú la compras y la llevas a casa, tienes la certeza de que funcionará.

Esta comodidad, en la cuál nunca reparamos, y es la que hace que la vida moderna sea posible, se llama estandarización. Si cada fabricante hiciese un casquillo con una rosca diferente, y hubiese quince distintos, comprar una bombilla cada vez que se funda otra sería una misión imposible.

Aplicado a Internet, el caso es exactamente el mismo... o debería. Los protocolos de comunicaciones, lenguajes de programación y descripción de datos, etc., usados como ladrillos con los que se construye Internet la WWW, están definidos por el W3 para que cada cuál no pueda hacer lo que le venga en gana en un mundo virtual en el que todos estamos obligados a respetarnos mutuamente.

Pero por desgracia, nada más lejos de la realidad. En parte por culpa de Microsoft (que ha roto muchos estándares con su fatídico y peligroso navegador Internet Explorer), y en parte por los "informáticos" que practican el intrusismo laboral y que piensan que hacer una web es como cambiar de canal en el TDT, la web está plagada de páginas que violan continuamente los estándares provocando auténticos quebraderos de cabeza tanto a usuarios como a profesionales de Internet.

Cada vez que una página no funciona en vuestro navegador y en el de vuestro vecino sí, siempre que intentáis entrar en un sitio y al final os salís sin haber podido hacer nada dentro de esa página, las veces que al visitar una web se ha quedado "colgado" el navegador y ha habido que matar la ventana y en ocasiones incluso reiniciar el equipo... ¿verdad que os suenan esas situaciones? Pues bien, con una gran probabilidad, todos esos problemas se daban a errores de programación/diseño de esas webs causados por no haber usado correctamente los estándares.

Para los desarrolladores de navegadores es aún peor: cada vez que sacan una nueva versión del navegador, tienen que tener en cuenta todas las posibles "guarradas" que ha hecho el programador de turno, y hacer el navegador mucho más tolerante a fallos ya que de otra forma sería casi inusable. Esto ocupa a los programadores miles de horas de trabajo ya que tienen que prever cientos de situaciones posibles y maneras en las que el webmaster no respetó las normas.

Para finalizar, me permitiré haceros unas recomendaciones que creo que os serán de utilidad para mejorar vuestra vida de internauta:



  1. No uséis Internet Explorer; además de ser un navegador más lento y pesado, su diseño interno le hace más peligroso a páginas web maliciosas y otro tipo de programas no deseados (virus, gusanos, etc.). Por otro lado, este navegador no es bueno interpretando estándares, y permite funcionalidades propias que fomentan la creación de páginas malas o que no respetan las normas.
  2. Usad en su lugar cualquier alternativa de código abierto y ampliamente comprobada por la comunidad mundial: Mozilla Firefox y Google Chrome se encuentran sin duda entre las mejores.
  3. Cuando un sitio web no funcione correctamente, y se tenga la sospecha de que la causa es una mala programación, es positivo tanto para el desarrollador como para la comunidad, enviarle un mail haciéndole constar el problema.
  4. Comprad un Mac de Apple, o instalad Ubuntu en vuestro PC como alternativa. Windows está construído sobre tecnología cerrada, propietaria de Microsoft, y por naturaleza inseguro y problemático; por el contrario, Mac y Ubuntu (una variedad de Linux), están fuertemente basados en Unix y en los estándares abiertos, lo cuál es favorable y consistente con el resto de razones expuestas en este artículo.
Espero que os haya servido para aclarar algunas dudas y arrojar un poco de luz sobre el mundo de las webs, los navegadores, los estándares y todas esas palabrejas que los informáticos proferimos tan a menudo.

Sed buenos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La Isla de Pascua y las piedras de Stonehenge: la última tontería magufa

A veces la ficción (magufa) supera por completo nuestras previsiones. En algún momento alguien hizo un dibujo con una clara orientación humorística que terminó como fuente de otra de tantas "teorías" alternativas habituales en el mundillo de la pseudociencia, junto al monstruo del Lago Ness, la desaparecida Atlántida o la Abominable Virgen de las Nieves . En concreto nos referimos a este curioso dibujo: Según la ilustración, se sugiere que las piedras de Stonehenge serían en realidad los pies de alguna de las cabezas Moai de la Isla de Pascua.

Hoax: El misterio de los números fenicios y sus ángulos

En cierta ocasión, un compañero de trabajo me contó una curiosa hipótesis según la cuál los símbolos que utilizamos hoy en día en nuestro sistema numérico decimal (para entendernos, 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9) tienen su origen en los números de los antiguos fenicios y que dichos símbolos representan el número según la cantidad de ángulos que tenía en su forma y trazo original. Quizás hayáis visto en algún blog una historia parecida pero atribuyendo el origen a los antiguos números arábigos. Incluso, rizando el rizo, hayáis encontrado artículos diciendo que dichos números son fenicios o arábigos, como si ambas cosas fuesen lo mismo pero con distinto nombre. Y en todos los casos os habrán mostrado una ilustración parecida a esta: El cero se supone que no tiene ángulos al ser redondo (aunque lo correcto sería decir que tiene infinitos ángulos dado que tiene infinitos lados ). En apariencia parece una hipótesis bastante coherente y no exenta de cierta belleza. La lást

EL BULO DEL MEDICAMENTO SUSPENDIDO

Buenas noches, queridas/os internautas/os y demás tribus de crédulos oligofrénicos. Hace escasamente unos minutos, he recibido un e-mail de alguien que pese a ser bastante inteligente, hombre de ciencias y objeto de gran admiración por mis partes, se ha tragado un bulo de estos que corren por Internet cuando algún tema peliagudo se pone de moda. En este caso, y en la línea de los conspiranoicos anti-farmaceúticas y anti-vacunas, el e-mail que alguien ha puesto en circulación nos alerta de un "gravísimo riesgo" de sufrir hemorragia cerebral si tomamos antigripales, debidos a la fenilpropanolamina que estos contienen supuestamente. El contenido del correo es este: Estas cosas no salen en las noticias, porque si no el mercado farmacéutico temblaría, pero como estoy vinculada al mundo sanitario, me llega información verdadera. Esther Dpto. Cardiología Hospital Insular. Gran Canaria Buenos días, no comprar antigripales, tomar solo termalgin o ibuprofeno (dalsy para l